Marruecos se encuentra en un cerco que se aprieta cada vez más en el Consejo de Seguridad. En un principio, en su confrontación con la ONU estaba el Enviado Personal del Secretario General de la ONU, Christopher Ross. Desde hace unos días, Ban Ki-moon también se ha sumado a la lista de los que levantan la ira de Marruecos, hasta el punto de obligar Mohamed VI a intervenir personalmente por teléfono en un desesperado intento de limitar los desgastes provocados por el informe del jefe de la ONU.
Por ello, Marruecos intenta por todos los medios ocultar su derrota en la ONU presentando la cuestión de los derechos humanos como único frente.
Si el Consejo de Seguridad se negó a ampliar el mandato de la MINURSO a la vigilancia de los derechos humanos, sigue reiterando claramente su llamamiento a “una solución política, justa, duradera y mutuamente aceptable que prevea la autodeterminación del pueblo del Sahara Occidental”. Lo cual implica el fracaso rotundo del intento de Marruecos y de su aliado Francia de desviar la naturaleza del conflicto saharaui que es y sigue siendo un problema de descolonización.
Otro frente en el que Marruecos se rompió los dientes es el del statu quo. Uno de los principales objetivos que Marruecos se había trazado en los últimos años es mantener esta situación de ni guerra ni paz para seguir saqueando los recursos naturales saharauis y obligar los saharauis a ponerse de rodillas mediante la salvaje represión y el empobrecimiento masivo de la población.
Sin embargo, el Consejo de Seguridad se pronunció claramente contra el statu quo calificándolo de “inaceptable” y subrayando la necesidad de que las negociaciones progresen. En esta resolución se lee entre las líneas el planteamiento del embajador Ross al que Marruecos había repudiado.
El Consejo también renovó su apoyo a los esfuerzos del Secretario General de la ONU y su Enviado Personal para el hallazgo de una solución a la cuestión del Sahara Occidental. Lo cual supone una nueva bofetada para Marruecos que ya no ve con buenos ojos a estos dos personajes.
Be the first to comment