Étiquette : Marruecos

  • El Mundo destapa las maniobras del Majzén para cubrir los verdaderos motivos de la desaparición de Lalla Salma

    Francia es el mecenas, la póliza de seguro y valedor de Marruecos en la Unión Europea y sobre todo en el conflicto del Sáhara Occidental. Por ello, el rey de Marruecos vela por su reputación en el país de Asterix y Obelix. Por eso, cuando los cotilleos sobre el rey y la desaparición de su esposa se limitaban a la prensa española, Mohammed VI se pasaba olímpicamente. Pero cuando el asunto vino de la revista Gala, el mayor magazine people en el pais aliado, intervino el rey en persona para silenciar a la prensa recurriendo incluso a las amenazas. Lo hizo a través de su abogado para recordar que la difusión de « informaciones maliciosas » es un « acto punible por difamación ».

    Con este gesto, Mohammed VI quiso parar el tema de la desaparición de su ex-esposa Lalla Salma, una desparición acompañada de múltiples rumores. Mediante un montaje escenógráfico de baja calidad quiso mandar un mensaje de apaciguamiento publicando antiguas fotos de Lalla Salma en la mayor de plaza de Marrakech y otra en el centro oncológico de Beni Mellal, pero la fuga de la princesa Haya de Jordania tiró sus planes por la borda. Ante las dimensiones del escándalo que suscitó de nuevo el tema de la desaparición de Lalla Salma, las autoridades marroquíes organizaron otra farsa en Grecia coronada por el fracaso a causa de la falta de pruebas ilustrativas.

    En un artículo publicado esta mañana, El Mundo trata el tema con una singular objetividad destacando que las fotos de la princesa marroquí desaparecida no tienen ningún valor ya que « on de archivo, con una antigüedad mínima de año y medio » y que lo que se conoce hoy de sus actividades son informaciones que se destilan « a cuentagotas » subrayando que nadie las ha visto ni puede confirmarlas.

    Según el diario español, « las filtraciones repentinas sobre el lujoso paradero de Salma, que buscan dar aparente normalidad a la vida de una princesa divorciada en no muy claras circunstancias y repudiada de forma radical por la realeza, se están intensificando a medida que pasa el tiempo con ella desaparecida ».

    Esas filtraciones y las amenazas de palacio no auguran nada bueno y sólo sirvieron para alimentar los rumores según los cuales, Lalla Salma fue asesinada de un tiro de pistola por Lalla Hasna, hermana del soberano marroquí.

    Tags : Lalla Salma, Marruecos, Francia, Mohammed VI,

  • Recrudece la represión marroquí contra el pueblo saharaui

    German Romano

    Días atrás las fuerzas represivas del Reino de Marruecos asesinaron a la joven saharaui Sabah Azman Hamida. Esto fue en el marco de masivas manifestaciones en territorios saharauis ocupados por Marruecos, donde se celebraba el triunfo de Argelia en la copa africana de fútbol masculino. Durante los festejos pacíficos las personas también solicitaban el fin de la ocupación.

    La Comisión Nacional Saharaui de Derechos Humanos (CONASADH) realizó un comunicado donde detalló la represión sucedida durante los festejos y el recrudecimiento de la situación en territorios ocupados. También solicitaron una investigación sobre la muerte de Sabah “Exige a las Naciones Unidas y al Consejo de Seguridad de la ONU que asuman su responsabilidad en llevar a cabo una investigación justa e imparcial por una comisión independiente para investigar la muerte del ciudadano saharaui Sabah Azman Ahmida y llevar a los responsables ante la justicia”. Asimismo la CONASADH solicita a la comunidad internacional un compromiso para descolonizar los territorios saharauis “Exhorta al Secretario General de las Naciones Unidas y al organismo de las Naciones Unidas de su misión MINURSO originalmente encargada de organizar el referéndum sobre la autodeterminación del pueblo saharaui de velar por la protección de la población civil saharaui, recordarles sus responsabilidades con el Sahara Occidental como última colonia pendiente de descolonización”.

    Captura de pantalla de video publicado por Equipe Media
    La represión y asesinatos contra el pueblo saharaui no son solo llevadas por las fuerzas represivas legales del estado. El Rey Mohamed VI también controla fuerzas paramilitares. En un video difundido por Equipe Media, se observa como un grupo golpea un vehículo y propina golpes contra tres personas en territorios saharauis ocupados. Esta agresión sucedió en el junio pasado cuando las personas que se encontraban en el vehículo fueron a recibir a un periodista saharaui preso, Salah Lebsir.

    El incremento de la represión y asesinatos por parte del Reino de Marruecos en territorios ocupados se sucede mientras se expulsan periodistas. En Junio de este año, Reporteros Sin Fronteras presentó el informe ‘Sáhara Occidental, un desierto para el periodismo’, un detalle minucioso de las detenciones y posteriores expulsiones a periodistas. Durante la exposición del informe llegaba, desde el Sahara Occidental, la información de la expulsión de la periodista española Judith Prat. En la presentación el interlocutor de la organización, Alfonso Armada expresó: “Desde Reporteros Sin Fronteras, condenamos esta nueva muestra de ceguera del régimen marroquí, que, situado en el puesto 135 del índice que elaboramos sobre la libertad de prensa en el mundo, dice mucho del respeto a los derechos fundamentales en nuestro vecino del Sur. Judith Prat tiene y merece todo nuestro apoyo. También los periodistas que ejercen su labor en el Sáhara, en condiciones casi imposibles y jugándose su libertad e integridad”.

    El Sahara Occidental

    El Sahara Occidental es un territorio ocupado por el Reino de Marruecos desde el año 1976, en forma previa la potencia ocupante fue España. Durante la dictadura fascista de Franco en el Reino de España, se produjeron constantes represiones y asesinatos contra el pueblo saharaui. La ocupación del Sahara Occidental no es reconocida por ningún organismo internacional y hay más de 100 resoluciones de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) sobre la colonización del Sahara Occidental.

    Más de 25 países reconocen La República Árabe Saharaui Democrática (RASD), no obstante, a pesar de las diversas resoluciones de la ONU, la ocupación y el régimen de apartheid continúan. Ningún país miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU reconoce la RASD. Sobre los motivos de la ocupación, Malainin Lakbal, miembro del observatorio saharaui de recursos naturales, expresa: “el Sahara Occidental es un territorio muy rico, con todo tipo de recursos, renovables y no renovables. Esta es una de las principales razones, respaldado por Francia por supuesto”. Sobre el motivo de apoyo de Francia a la ocupación plantea: “también somos un objetivo para Francia, porque quiere tener un Marruecos fuerte para conservar un cierto equilibrio y no permitir que Argelia se convierta en la principal potencia en el norte de África”.

    En 2016, el gobierno de Rabat expulsó el personal de la Misión de Naciones Unidas para el referendo en el Sáhara Occidental (MINURSO). En un nítido enfrentamiento con quien fuera el Secretario General de la ONU, Ban Ki-moon que expresó su apoyo a la RASD. Entre los territorios liberados y el territorio ocupado, el Reino de Marruecos construyó el muro más largo del mundo denominado “el muro de la vergüenza”, son 2.700 kilómetros con más de 7 millones de minas y vigilado por 100.000 soldados. La ocupación es posible, por el sostenimiento de los vínculos políticos y comerciales con el Reino de Marruecos, la Unión Europea y el Mercosur están intensificando los acuerdos comerciales con el estado ocupante. También las acciones criminales del Reino son posibles por las declaraciones estériles de la comunidad internacional.

    Fuente : Virginia Bolten

    Tags : Sahara Occidental, Marruecos,

  • La comunidad saharaui tacha de cómplice del expolio de sus recursos a la Autoridad Portuaria de Las Palmas

    Un buque cargado de harina de pescado atracó este viernes 26 de julio a las 6.30 horas en el Puerto de La Luz y Las Palmas para « recargar combustible »
    A pesar de que el origen directo del barco fue la ciudad mauritana de Nuadibú, la Asociación Canaria de Amistad con el Pueblo Saharaui (Acaps) afirma que el Leader Canakkale salió el miércoles de El Aaiún cargado con recursos del Sáhara ocupado

    Acaps pide a la Autoridad Portuaria que no sea cómplice del expolio y que no actúe en contra de las sentencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea. Por su parte, el organismo portuario elude responsabilidades y defiende que el control del contenido solo depende de Fronteras.
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    (CanariasAhora. Natalia G. Vargas) Un buque cargado de harina de pescado atracó este viernes 26 de julio a las 6.30 horas en el muelle de Cambulloneros, en el Puerto de La Luz y Las Palmas. Llegó a la Isla desde la ciudad mauritana de Nuadibú, tal y como ha confirmado a este periódico la consignataria del barco: Las Palmas Shipping. Sin embargo, según la Asociación Canaria de Amistad con el Pueblo Saharaui (Acaps), el origen real de su contenido son los territorios ocupados del Sáhara Occidental. « El barcó salió de El Aaiún con un cuarto de su capacidad de carga el miércoles, luego pasó por Mauritania a aumentar el contenido y, después, a Gran Canaria para repostar, porque en el Sáhara no hay capacidad suficiente para dar combustible », explica Anselmo Fariña, uno de los miembros de la asociación.

    Alertados de que el buque Leader Canakkale atracaría en la capital grancanaria, los miembros de Acaps lanzaron de inmediato un comunicado a la Delegación del Gobierno, a la Autoridad Portuaria y a la Guardia Civil, que también llegó a los medios de comunicación, pidiendo que prohibieran la escala del barco. « Si las autoridades permiten que haga labores de aprovisionamiento de combustible, van a cooperar en un tráfico ilegal contrario a las sentencias del Tribunal de Justicia de la Unión Europea », advirtió la asociación.

    En una sentencia dictada el 21 de diciembre de 2016, el TJUE dejaba claro que no se pueden negociar acuerdos comerciales con Marruecos que incluyeran recursos del Sáhara Occidental, un territorio pendiente de autodeterminación. Además, en varias ocasiones se ha concluido la necesidad de que cualquier tipo de negocio cuente con el apoyo favorable de la población y que sus beneficios reviertan en ella. Según Acnur, esta población es la misma que contabiliza unas 500.000 personas refugiadas en campos como el de Tinduf, Argelia, huyendo del conflicto que asola su territorio por el control del mismo.

    La Autoridad Portuaria ha señalado a Canarias Ahora que desconocía la existencia de este comunicado y que el control del contenido de los buques que llegan al puerto no depende de este órganismo, sino de Fronteras. « Nos limitamos a ceder suelo ». Pero para Acaps, « todo lo que permite el desarrollo de esa actividad ilegal (el comercio con recursos del Sáhara Occidental, territorio no autónomo según la ONU), es consecuentemente contrario al Derecho Internacional ». « Eso incluye el suministro, reparación o cualquier tipo de apoyo logístico a los barcos que son necesarios para que el expolio se lleve a cabo », añade la asociación.

    La Autoridad Portuaria confirmó que el Leader Canakkale, un buque con una capacidad de carga de 6.830 toneladas, estuvo en el puerto tres horas con previsiones de partir el mismo día. Según el radar matítimo Marine Traffic, su destino es Turquía.

    En esta ocasión, la presencia de un barco cargado con recursos que, según Acaps, proceden del Sáhara Occidental solo tenía la finalidad de repostar. Sin embargo, en otras ocasiones, el propósito era descargar. Un reportaje publicado en 2018 en la revista de investigación 360 reveló que Canarias obtenía millones de toneladas de arena saharaui cada año destinada a la construcción o al sector turístico.

    Según la revista, el volumen de este material que llega al Puerto de Las Palmas es superior al de Tenerife. En los últimos cinco años, el Dura Bulk, uno de los buques que realiza esta ruta, habría atracado en la Isla más de 200 veces. Arena « manchada de sangre », según las palabras que en la misma periodística formuló el delegado del Frente Polisario en el Archipiélago, Hamdi Mansour.

    Fuente : Canary Ports, 28 jul 2019

    Tags : Sahara Occidental, Marruecos, Canarias, España, expoliación, recursos naturales, Leader Canakkale, Dura Bulk,

  • La cultura saharaui. Una cultura milenaria en un contexto conflictivo

    El Sáhara Occidental se corresponde con la antigua colonia española del mismo nombre y está situado en el reborde atlántico del gran desierto del Sáhara. Se extiende entre el río Uad Draa, al norte, en relación a Marruecos; la península de Ras Nouadhibou (antiguo cabo Blanco), al sur, en relación a Mauritania; y el desierto del Sáhara, por el este, en los límites fronterizos de Argelia, en su mitad norte, y Mauritania, en la sur.

    El desierto del Sáhara es un vasto territorio que cruza de este a oeste casi toda la franja septentrional del continente africano, con una extensión de unos diez millones de km2, lo que le convierte en el mayor del mundo. Dado su carácter cálido, es un medio inhóspito para la vida en general. Su escasa vegetación tiene como excepción la que se concentra en los limitados oasis existentes. Este hábitat tan adverso ha condicionado que los grupos humanos que llevan viviendo durante al menos tres milenios hayan adquirido unas formas de vida predominantemente nómadas y una organización social tribal, con una fuerte presencia de los lazos consanguíneos.

    La situación política surgida desde la década de los 70

    El Sáhara Occidental es un territorio incluido dentro del Comité de Descolonización de la ONU, sin que hasta la fecha se haya solucionado el contencioso internacional surgido en noviembre de 1975, tras la firma de unos acuerdos secretos entre los gobiernos de España, Marruecos y Mauritania; y la ocupación militar de Marruecos y Mauritania desde 1976, mantenida sólo por Marruecos desde 1979.

    Marruecos denomina al territorio ocupado con el nombre de provincias meridionales, aunque en la práctica sólo tiene controladas las dos terceras partes del mismo, delimitadas mediante un muro o berma de unos dos mil kilómetros de longitud, cuya franja oriental se encuentra controlada por la República Árabe Saharaui Democrática, fundada en 1976. A lo largo de estos años ha organizado una explotación de los recursos naturales, administradas por empresas en su mayoría francesas y españolas, que operan preferentemente en la minería (fosfatos) y la pesca. A la vez el gobierno ha fomentado el asentamiento de población procedente del propio Marruecos. Resulta difícil ofrecer una cuantificación del conjunto de la población existente y su reparto según la procedencia, pero se estima que está en torno a unas 270.000 personas, la mayoría saharaui.

    En 1976 se fundó la RASD, actualmente reconocida por alrededor de 70 países. Aunque su Constitución contempla como territorios propios los ocupados por Marruecos, su asentamiento real se encuentra en el territorio cedido temporalmente por Argelia en la zona de la Hamada de Draa o Tindouf, donde habita parte de la población que se refugió en 1976 al inicio de la guerra contra Marruecos y Mauritania. En la actualidad esta población exiliada está cuantificada en unas 200.000 personas.

    Toda esta situación ha hecho que resulte complejo hacer una delimitación política y poblacional clara del territorio.

    Los orígenes del pueblo saharaui

    Parece extendida la idea que el pueblo sanhaja es el antecesor de los distintos grupos bereberes que acabaron asentados en la mitad oeste del norte de África hace unos 3.000 años. Distintos avatares históricos en los siglos siguientes fueron dando cierta personalidad a uno de los grupos que acabaron conformándose en la parte occidental del desierto del Sáhara. Entre dichos avatares se encuentra la relación con otros pueblos, como el soninke (situado más hacia el sur y de piel negra) e incluso un grupo beduino árabe procedente del Yemen, éste en el siglo XIII; o la islamización religiosa y cultural, iniciada entre los siglos VII y VIII, paralela a la de los pueblos de la parte más septentrional del continente, y consolidada con la expansión almorávide, en el siglo XI, y la presencia del grupo árabe yemení, en el siglo XV. Los grupos tribales sahararuis occidentales en su mayoría tenían un carácter nómada, influidos en distinto grado por las poblaciones sedentarias asentadas en sus extremos más septentrional y meridional.

    La población resultante de las fusiones de las distintas etnias, con predominio del elemento árabe-bereber, era fundamentalmente nómada, dedicándose al pastoreo; en menor medida, al comercio a través del desierto, en ruras que iban en las direcciones este-oeste y norte-sur; y a la pesca, en las zonas próximas a la costa atlántica.

    El contacto con el mundo europeo occidental data del siglo XV, en el momento en que varios estados de esta parte del continente iniciaron una expansión territorial hacia el sur de África, en busca de rutas, recursos y mano de obra esclava. Pero fue el colonialismo del siglo XIX, concretado con la ocupación progresiva por parte de España desde finales de siglo, lo que alteró en parte la situación de las tribus del desierto, no tanto por lo que supuso de ruptura con las formas tradicionales de subsistencia como por la pérdida de la soberanía que los distintos grupos tribales ejercían libremente y sin injerencias externas. Fue una situación que no estuvo exenta de conflictos hasta los años 30 del siglo XX, bien en forma de enfrentamientos, más o menos abiertos, como de resistencias.

    El proceso descolonizador de las antiguas colonias en todo el mundo, auspiciado finalmente por la ONU, tuvo como culminación la demanda por este organismo a España en 1965 del inicio del proceso correspondiente. Pese a ello, las demandas territoriales por parte de Marruecos y Mauritania acabaron con la firma en noviembre entre los gobiernos de los tres estados de los llamados acuerdos tripartitos, mediante los cuales de facto los dos primeros estados acabaron repartiéndose el Sáhara Occidental y España se desentendió de su responsabilidad como antigua potencia colonial. Pese al dictamen del Tribunal Internacional de Justicia de La Haya en 1975, y las reiteradas resoluciones de la ONU, la OUA y la UA, Marruecos las ha incumplido, aprovechándose del apoyo que tiene de potencias como Francia y EEUU, y la política ambigua mantenida por los gobiernos españoles, que, sin negar el derecho a la autodeterminación que le asiste y le reconoce la ONU, se niega a aplicar una política de apoyo efectivo hacia el pueblo saharaui, prefiriendo una situación de statu quo con su vecino del sur y sus aliados occidentales.

    Una cultura milenaria

    La cultura saharaui occidental, milenaria en sus orígenes y desarrollo, se inscribe en un ámbito territorial muy limitado para el desenvolvimiento de los grupos humanos, a la vez que corresponde a una población muy reducida en número. A esto hay que unir las interferencias políticas que está sufriendo especialmente desde 1975, momento en que se inició la ocupación militar por Marruecos. Todo ello no impide que se pueda hablar de una cultura específica, con lazos de diversas índole con nuestro país, derivados de la presencia colonial durante aproximadamente un siglo y también de las relaciones que numerosas personas, organizadas en grupos de apoyo a su causa, mantienen.

    Se trata de una cultura viva que mantiene elementos tradicionales, muy ricos en sus formas y contenidos, y que ha aportado nuevos elementos, en unos casos producto de una reinterpretación de los tradicionales en un contexto nuevo y en otros casos surgidos en la misma realidad actual.

    Los componentes principales de la cultura saharaui

    La cultura saharaui se ha ido conformando a lo largo de un proceso histórico, que le ha permitido dotarse de una personalidad propia, creada entre por la confluencia de sus propias tradiciones y las que sucesivamente han ido aportando otras cultura. En este sentido se han destacado cuatro grandes componentes de la cultura saharaui actual, originados en épocas históricas más antiguas, a los que habría que unir un quinto componente más reciente en el tiempo: la tradición ideológica que representa el Islam; las prácticas económicas en el marco de división de tareas entre varones y mujeres; la organización familiar tradicional; el equilibrio poblacional entre varones y mujeres; y la situación socio-política creada desde 1975 (Niño y Marvena).

    En todos estos componentes se ha destacado como un elemento clave, que ayuda a integrarlos y darles una coherencia de conjunto, el papel que juegan las mujeres, algo que resulta relevante en sí mismo y en relación a las culturas más cercanas y de una manera especial la cultura marroquí, que desde las últimas décadas ha entrado en conflicto con la saharaui.

    La tradición islámica

    Se trata de un componente que resulta común a todos los pueblos situados en el norte de África, desde la costa mediterránea hasta las zonas situadas al sur del desierto, y que incluye además a Marruecos. Pese a ello, el pueblo saharaui ha ido creando desde siglos atrás una serie de rasgos propios, desde el mantenimiento de algunos hasta el mestizaje con otros, que le han ido confiriendo su propia personalidad. Uno de ellos es el papel que ha jugado la mujer, siempre desde una mayor libertad de acción, que con frecuencia se ha interpretado como prácticas contrarias al Islam. Así se explica la costumbre de la cara destapada, los juegos eróticos entre jóvenes en algunas tribus, etc.

    Partiendo de la consideración del Islam no sólo como una religión, sino como una forma de vida, la interrelación del pueblo saharaui con el medio donde viven ha hecho que se haya hecho una adaptación de los rituales propios de la religión al propio entorno. Así, por ejemplo, la purificación con agua antes del rezo en las mezquitas se hace en el desierto con arenas y piedras.

    La misma literatura se circunscribió en otras épocas dentro de la tradición islámica, con predominio de las formas orales de transmisión, pero sin olvidar también las escritas. Entre las primeras se encuentra la lejtá, en la que se improvisaban poemas como una forma de sublimación de las rivalidades tribales. Y entre las segundas, la lejna. Hoy se mantiene viva una gran creatividad literaria, donde la poesía cobra un valor importante.

    Las prácticas económicas

    Partiendo del carácter predominantemente nómada de la cultura saharaui, el papel que juegan las mujeres resulta más relevante, con una menor presencia de los elementos patriarcales. Esto se ha traducido en una importante presencia de las mujeres en la vida económica, algo que ha contrastado con la que han tenido en las culturas vecinas del norte. Si la vida nómada ha exigido una permanente movilización de todo el grupo familiar, la división de tareas en relación al sexo-género ha conllevado que las mujeres hayan tenido una posición importante en las que le correspondían, independientemente de las responsabilidades asignadas en el marco de la organización del núcleo familiar.

    En la actualidad el nomadismo sigue existiendo y, aunque no es un elemento residual, sí va adquiriendo menor importancia en relación a las distintas actividades económicas realizadas tanto en los territorios ocupados como en la Hamada del Draa. Su mantenimiento refleja no sólo formas económicas y sociales que en el pasado fueron preponderantes, sino también otras formas que reproducen simbólicamente elementos propios de su identidad colectiva.

    Organización socio-familiar

    La sociedades nómadas tienen en los lazos de consanguinidad uno de sus rasgos sociales más característicos. La relación entre la familia y la tribu se convierte en la forma como se imbrican las personas en el conjunto social. Los jefes de familia suelen conformar estructuras de control y gestión mediante asambleas de tribales, que en la cultura saharaui se ha denominado yemáa. Fue utilizada desde 1934 por España como institución intermediaria entre la población saharaui y la metrópoli colonial, y llegó a ser utilizada por Marruecos entre 1975 y 1976, el momento en que se estaba dilucidando el futuro del Sáhara. La organización política de la RASD, sin embargo, ha eliminado esa institución por su naturaleza elitista, al dotar a una minoría de la toma de decisiones, sustituyéndola por un parlamento, órgano del poder legislativo, al que denominan Consejo Nacional saharaui.

    Resulta propio de las sociedades menos evolucionadas el mayor componente matriarcal en la organización familiar y, como consecuencia, en la social, en la medida que ésta tiene un importante componente de lazos consanguíneos. Es el caso de las sociedades nómadas, uno de los rasgos del pueblo saharaui. A lo largo de los últimos siglos, en parte por influencias de los pueblo vecinos, se fue dando una progresiva erosión de las viejas formas matriarcales hacia otras patriarcales, con el consiguiente predomino del varón en general y del patriarca en particular. Pese a ello se han ido manteniendo elementos de la tradición matriarcal, como son la práctica del noviazgo sin obligación de casarse, la autonomía para elegir al marido, el mantenimiento de su apellido familiar, el derecho al divorcio, la obligación por el marido/padre de contribuir económicamente al manteniendo de los hijos e hijas, etc.

    En este modelo de relaciones son frecuentes las fiestas que por distintos motivos se realizan, incluidas las relacionadas con los divorcios de las mujeres, una muestra de que no son percibidas como un trauma. Las noches son los momentos donde se manifiesta la libertad de acción de las propias mujeres, dentro de unas formas donde a la costumbre antigua del uso de la henna para pintarse las manos y los pies, se une la representación de dibujos geométricos y simbólicos, algunos presentes en restos de cerámica de hace cuatro mil años.

    El equilibrio poblacional entre varones y mujeres

    El equilibrio poblacional entre el número de varones y mujeres en la mayor parte de las sociedades y de las épocas ha sido precario, debido a causas diversas, pero donde el factor biológico (mayor resistencia del organismo de las mujeres) y diversas prácticas socio-culturales, como la guerra, han resultado favorables a las mujeres. En el caso de las sociedades del desierto ha ocurrido lo mismo, lo que ha permitido explicar la práctica de la poligamia. Entre las tribus saharauis, sin embargo, el número de varones ha tendido a ser superior. En la actualidad este reparto resulta diferente según el espacio al que nos refiramos. Así, en los campamentos de refugio en la Hamada hay un mayor número de mujeres, mientras que en las zonas ocupadas hay más varones. Esto en parte se explica por el hecho de que en la población que huyó desde 1975 había más mujeres, o que las secuelas de la guerra y la resistencia contra Marruecos haya afectado de una forma más directa a los varones, con muertes o encarcelamientos en prisiones.

    La situación socio-política creada desde 1975

    Este componente es el más reciente, producto de la confrontación con Marruecos, en mayor medida, y Mauritania, hasta 1980. De esta manera la lucha política que este pueblo viene desarrollando en lo territorios ocupados y en la zona de la Hamada desde la década de los 70 se ha complementado con el desarrollo de distintas prácticas, bien tradicionales o bien nuevas, que no han hecho más que consolidar su identidad, pese a la aparición de nuevos elementos, que han sido producto del contacto con determinados países y la dimensión más intensa que tienen las relaciones entre países y culturas en el contexto de una sociedad globalizada y altamente tecnificada.

    Es así como se entiende la relevancia que las mujeres han ido manteniendo y en algunos aspectos también aumentado, donde han ido confluyendo elementos tradicionales, las necesidades de la nueva situación y una mayor conciencia del papel que deben jugar en la época actual. Las mujeres saharauis muestran una imagen de personas con un gran grado de autonomía, una gran responsabilidad social, al margen de la tradicional familiar, y una importante presencia en algunos ámbitos de la vida pública, a veces abrumadora. Esto no quita para que se pueda hablar de una equidad entre los géneros y especialmente en los principales ámbitos de decisión.

    Esta realidad explica en parte que en los campamentos de refugio de la Hamada del Draa en las mujeres recaiga la mayoría de las tareas (Niño y Mervena), como la administración de recursos, la producción de manufacturas, la educación, la sanidad…; o que ocupen de una forma abrumadora los cargos municipales (95%), y de los comités de barrio (100%) y locales (80%). Lo que contrasta, no obstante, con que esta responsabilidad sea menor en los comités regionales (45%), el parlamento (11%) o el gobierno (sólo hay una ministra, que representa el 4%). Quizás también explique el papel que muchas mujeres de las zonas ocupadas están jugando en la resistencia contra Marruecos, como es el caso de Aminatu Haidar, de una larga trayectoria en su lucha, y otras tantas mujeres que salieron en parte a la luz cuando protagonizó su huelga de hambre a finales de 2009.

    Las relaciones con algunos países, entre los que destacan Argelia, Libia, España y Cuba, están permitiendo ampliar los horizontes incluso hacia otros continentes. Si con Argelia y Libia existe una mayor proximidad cultural, con España y Cuba se da el contacto con realidades muy distintas, a la vez que variadas. A esos países acuden jóvenes de los dos sexos a formarse en estudios secundarios y universitarios. En el caso de España existe la práctica muy extendida del acogimiento temporal en familias de niños y niñas, o las continuas visitas que se hacen a los campamentos del desierto, lo que pone a la luz la enorme solidaridad existente entre amplios sectores de la población española con el pueblo saharaui. Se ha destacado que en esos países “no pierden los elementos constitutivos de su cultura, mantienen su religión, la ceremonia del té, lo cual hace menos traumático su regreso a la realidad del exilio en la Hamada”, una vez que han finalizado sus estudios (Niño y Mervena).

    El mundo de la educación es un ámbito donde las relaciones con otras culturas están presentes. Así, el sistema escolar tiene establecido a partir del cuarto curso la enseñanza de la lengua castellana, de manera que con la árabe, en su dialecto hassaní, es una de las dos lenguas oficiales y de relación con el mundo.

    Para acabar

    Hay un proverbio saharaui que dice: « los momentos difíciles se superan con calma ». Quizás esa paciencia es la que está permitiendo a este pueblo que, al menos, pueda seguir sobreviviendo en un contexto tan conflictivo.

    En Barbate, a 14 de abril de 2009

    Documentación de referencia

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    PRADA, F. J. (2002). Las jaimas de Ardelgamar. Saharauis encadenados. Ponferrada, Cornatelius.

    PRADA, F. J. (2006). Sembrando metecos y recogiendo sirocos. Ponferrada, Cornatelius.

    PRADA, F. J. (2006). Si me quieres escribir. (El papel lo aguanta todo). Ponferrada, Cornatelius.

    Vídeos

    El cielo contra el Sáhara. Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui de Salamanca / TeLévisión Salamanca, fecha desconocida.

    OCIO, J. J., GARCÍA, M. y LASO, J. (2005). Espejismo. Ilusiones de un niño del desierto. Madrid, Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui de Salamanca / Producciones Cine de Guerrilla.

    Fuente : Entre el mar y la meseta, 6 marzo 2011

    Tags : Sahara Occidental, Marruecos, Frente Polisario, España, descolonización, cultura, tradición,

  • Mensaje de solidaridad urgente con el pueblo saharaui

    En los pasados días, recibimos desde el Sahara Occidental un llamado a la solidaridad a partir de nuevos ataques a los derechos humanos perpetrados por la autoridades marroquíes.

    Durante las celebraciones tras el triunfo de Argelia en la Copa África, cientos de jóvenes saharauis salieron a las calles de El Aaiún para celebrarlo, resultando en una protesta contra la situación a la que está sometidos/as.

    Frente a esto, las Fuerzas Auxiliares Marroquíes reprimieron fuertemente a las personas que se encontraban en la calle, saldándose su intervención con el asesinato de la joven Sabah Otman Ameida. Además, decenas de jóvenes fueron heridos/as con balas de goma y gases lacrimógenos.

    Existen grabaciones que recogen la brutalidad de las fuerzas de ocupación marroquíes, quienes se abalanzan con sus vehículos 4×4 contra los y las manifestantes, al tiempo que golpean con palos y piedras, mostrando así su voluntad de generar todo el daño posible sobre la población saharaui.

    Desgraciadamente, este nuevo capítulo no supone ninguna sorpresa para los y las amigas del pueblo saharaui, que venimos denunciando de manera continuada la violación sistemática de derechos humanos por parte del régimen marroquí.

    Desde la Juventud Comunista enviamos nuestro fraternal abrazo de solidaridad a nuestra organización hermana UJSARIO y extendemos nuestras condolencias a los familiares y amigos de la joven asesinada. También hacemos un llamamiento a la comunidad internacional, así como a las organizaciones antiimperalistas y la juventud del mundo a alzar sus voces por el fin de la ocupación marroquí.

    ¡Sahara libertad, Polisario vencerá!

    Fuente: Juventudes Comunistas, 26 jul 2019

    Tags : Sahara Occidental, Marruecos, represión, juventudes comunistas, UJSARIO,

  • Amargo como la vida, dulce como el amor, suave como la muerte

    Los saharauis no tienen casi nada. Expulsados por Marruecos, olvidados por España, viven en campos de refugiados en terreno argelino -la declarada República Árabe Saharaui Democrática, RASD- con pocas posibilidades de producir y con ninguna oportunidad para el desarrollo. Pero tienen algo que nadie les puede quitar.

    Una tradición que conservan con el paso de los años: invitar a té cuando reciben visitas. Puede que no tengan agua, puede que no tengan luz o puede que ese día no sea posible comer cabra o camello, pero nunca les falta té para ofrecer. ¿Por qué? Porque el té es algo más que una simple bebida.

    VIDA, AMOR Y MUERTE

    Para los saharauis, ofrecer té es un gesto de generosidad y aceptarlo es de cortesía. Sentados sobre el suelo en círculo, en sus pequeñas casas de adobe, anfitriones y huéspedes disfrutan de conversaciones lentas aderezadas con sorbos de un té caliente que inexplicablemente quita la sed del desierto. Pero las visitas no sólo aceptan tomar un té, sino tres. Son tres los que deben tomarse durante la estancia en casa ajena, cada uno con un sabor ligeramente diferente. El primero es más amargo (tiene menos azúcar), el segundo más dulce y el tercero más ligero. Los tres tes tienen su explicación poética que los propios saharauis te explican: “El primero es amargo como la vida, el segundo es dulce como el amor y el tercero es suave como la muerte”. Vida, amor y muerte. Por eso el té saharaui define tan bien la esencia de su pueblo.

    Se trata de té verde importado de China, cuya originalidad radica en la forma en que lo preparan y sirven. Es toda una ceremonia en la que se deben cumplir los pasos para que el sabor del té sea el que caracteriza a este pueblo del desierto.

    Echan agua en una tetera (berred) que calientan con brasas de carbón vegetal. En ella vierten medio vaso de té, aunque la primera ración será desechada por ser demasiado amarga. Vuelven a verter agua en la tetera con té y esta vez echan bastante azúcar. Cuando hierve, el té será escanciado en unos pequeños vasos (kisan). Desde el primer vaso se escanciará en el segundo y así, varias veces hasta conseguir la espuma deseada y el sabor idóneo. Su color dorado, su espuma blanca, su abrasante calor, sus virutas de hierbas al final del vaso, su dulzura extrema, su adicción, el té saharaui lo tiene todo para enamorarte del momento.

    Sus vecinos de Marruecos también sienten una pasión por el té, en especial por el de menta, si bien su ceremonia de preparación no es tan romántica como la saharaui. También en las casas marroquíes el té es símbolo de hospitalidad, siempre acompañado de ricas pastas o dulces árabes. Servido generalmente en cuberterías más lujosas -plateadas- que las saharauis, la cortesía marroquí en torno al té es similar. Beber té en el Sáhara no es sólo disfrutar de una bebida dulce; es vivir un auténtico momento de placer que deseas que no termine nunca, ya sea en una casa de adobe en mitad del desierto saharaui, como al atardecer en una terraza de Jemaa el-Fnaa (Marrakesh) con los rezos de la mezquita de fondo.

    Fuente : Comidas Magazine, 21 mayo 2014

    Tags : Sahara Occidental, Marruecos, té saharaui, menta, tradición, hospitalidad,

  • El apoyo a los saharauis :Una cuestión de principio para Argelia

    Como todos los años, Boumerdes, desde ayer, alberga la universidad de verano de cuadros saharauis y el Frente Polisario. Esta décima reunión se celebra bajo el signo « Los pueblos saharaui y argelino: fraternidad, compromiso y fidelidad ». ¿Pero realmente necesitamos recordar el compromiso de los argelinos con los saharauis?

    Para Argelia y su pueblo es una cuestión decidida desde hace 40 años. Registrado desde 1966 en la lista de Territorios no autónomos, y por lo tanto elegible para la implementación de la Resolución 1514 de la Asamblea General de las Naciones Unidas, que lleva la Declaración sobre la concesión de la independencia a los países y pueblos coloniales, el Sáhara Occidental es la última colonia en África, ocupada desde 1975 por Marruecos. Una colonización que Argelia no puede aceptar para seguir siendo fiel a sí misma. Pero mientras su posición la expone a muchos « reproches », Argelia no deja, sin embargo, de recordar que su apoyo a los saharauis emana de un principio inmutable.

    Argel apoya ni más ni menos que el derecho a la autodeterminación de un pueblo que se niega a ser colonizado. Y mientras la cuestión del Sáhara Occidental esté establecida en términos de descolonización, no puede ser de otra manera. Que las otras partes involucradas en este conflicto no estén dispuestas a entender es al menos perjudicial en la medida en que este malentendido, o peor aún, la negativa a cumplir con el derecho internacional, retrasa la solución de un conflicto que ha durado demasiado.

    ¿Hay que ser realmente ciego para no ver que esta solución que buscan las Naciones Unidas solo se puede encontrar a través del ejercicio, por parte del pueblo del Sahara Occidental, de su derecho inalienable e imprescriptible a la libre determinación?

    No hay otras salidas. Marruecos, que cree que el tiempo juega a su favor, parece olvidar que un pueblo determinado a obtener su independencia nunca renunciará y que frustrará todas las maniobras iniciadas para disuadirlo de seguir su lucha.

    Rabat debe saber que no tiene más remedio que negociar directamente, sin condiciones previas y de buena fe con el Frente Polisario. Es esta la vía que llevará a una solución política, justa, duradera y mutuamente aceptable. Y tal solución debe permitir la autodeterminación del pueblo del Sáhara Occidental.

    Nadia K.

    Fuente: El Moudjahid, 27 jul 2019

    Tags : Sahara Occidental, Marruecos, Argelia, autodéterminación, descolonización,

  • La ignominia de la entrega del Sahara

    Jesús Mª Montero Barrado

    Se cumplen estos días el 40 aniversario de la Marcha Verde, que el nombre que recibió la movilización de miles de marroquíes que el gobierno de Marruecos, con su rey Hassan II a la cabeza, organizó con destino al Sáhara Occidental, por entonces todavía colonia española, utilizada como medio de presión contra el gobierno español. En enero de 1999, en su número 33, salió un breve artículo mío en Debate Ciudadano donde me refería a lo ocurrido. Para el pueblo saharaui todo sigue igual.

    El otoño del 75, testigo de la muerte de Franco, también fue el de la entrega del Sáhara Occidental a Marruecos y Mauritania. Desde que en 1884 España colonizara la parte occidental del vasto desierto africano, casi un siglo después se vivió otro de los capítulos vergonzosos de nuestra historia. Lejos de asumir las responsabilidades como potencia colonizadora, que exigía el respeto de las decisiones de la ONU y a la población que habitaba el territorio colonizado, el gobierno español culminó con los acuerdos de Madrid (12-14 de noviembre) la representación de una farsa, cuyo guión se fue escribiendo desde años atrás.

    En una época donde los restos de los antiguos imperios coloniales estaban a punto de liquidarse, le tocaba el turno a la provincia española del Sáhara Occidental, que había conocido el nacimiento del Frente Polisario, movimiento nacionalista saharaui que luchaba por la independencia. Siguiendo las instrucciones de la ONU, el ministerio de Exteriores español había anunciado en agosto de 1974 la celebración de un referéndum entre la población saharaui para los primeros meses de 1975 con el fin de que decidiera su futuro.

    La intención del rey de Marruecos, Hassan II, era, por el contrario, la anexión. Inició así una carrera contrarreloj que le permitiera retrasar el referéndum y ganar tiempo y aliados. La apelación ante el Tribunal de Justicia de La Haya tuvo como fin encontrar un resquicio legal que justificara sus pretensiones, convenciendo a su vez a Mauritania para que hiciera lo propio a cambio de una parte del botín.

    Es así como se llegó al otoño del 75, cuando el dictamen del Tribunal de La Haya (16 de octubre), fue tergiversado por Hassan II, que anunció a la población la existencia de derechos históricos y convocó la marcha de 350.000 personas para ocupar el Sahara, iniciada el día 21 y finalizada el 9 de noviembre. ¿Pero qué había ocurrido en realidad?

    En algunos círculos de poder españoles ya se había gestado la decisión de entregar al vecino del sur (Alto Estado Mayor, varios ministros, etc.) y personas con intereses económicos en Marruecos (el ministro Solís era el más relevante). El gobierno francés estaba interesado en consolidar la posición de su país en la zona. Y, sobre todo, EEUU quería fortalecer a su principal aliado en el flanco suroccidental atlántico frente a Argelia y Libia y evitar la aparición de un estado nuevo que, por la ideología del Frente Polisario, le podía crear problemas.

    Los sucesos ocurridos en los meses de octubre y noviembre fueron una farsa porque estaba todo decidido con antelación: en el mes de abril el Alto Estado Mayor y la Presidencia del Gobierno ya habían decidido la entrega a cambio de compensaciones (bases militares, acuerdos económicos, Ceuta y Melilla); el 17 de octubre (el mismo día que Franco cayó definitivamente enfermo y un día después del anuncio de Hassan II de convocar la Marcha Verde) el gobierno aprobó la decisión y al día siguiente se dio la orden de evacuación de la población española (« operación golondrina »).

    Desde meses atrás se estaba preparando la Marcha Verde, donde intervino, entre otros, el departamento de Estado de EEUU; la marcha, lejos de ser una operación de ocupación, fue la excusa perfecta que Hassan II utilizó para forzar las resistencias existentes entre los círculos de poder españoles, sobre todo en el ministerio de Exteriores.

    Ridículo fue el papel de los embajadores españoles ante la ONU defendiendo el referéndum y los derechos de la población saharaui, mientras sus ministros y jefes militares negociaban lo contrario. Fue ridículo lo que hicieron los gobernantes españoles siguientes, que consintieron el incumplimiento por Marruecos de lo acordado en noviembre. Pero, sobre todo, indigno fue el comportamiento de quienes abandonaron a un pueblo valeroso que no dudó en defender su dignidad a costa de una guerra que dura hasta nuestros días. Responsabilidad extensible a quienes, en los años sucesivos y hasta nuestros días, permitieron que todo siguiera igual.

    Fuente : Entre el mar y la meseta, 6 nov 2015

    Tags : Sahara Occidental, España, Marche Verde, Marruecos, traición,

  • El pueblo saharaui

    Jesús Mª Montero Barrado

    Estoy echando una mano a mi hermano Juan Miguel en el escrito que ha hecho sobre su viaje de hace tres años a los poblados saharauis situados en Tindouf. Esto me ha servido para referirme en esta ocasión a este sufriente pueblo. Mis recuerdos del Sáhara Occidental datan de la niñez, cuando era formalmente una provincia española. Tengo en mi memoria las imágenes de televisión de los representantes saharauis en las Cortes, ataviados con sus vestidos anchos y turbantes, en el momento de la votación del príncipe Juan Carlos como heredero de Franco.

    Años después (en 1974 quizás) llegó a mi casa un cartel, que se hizo famoso en su día, donde aparecía la fotografía de una mujer amamantando a su hijo y se podía leer POR UN SAHARA LIBRE. La fotografía la había hecho el artista Martín Prado, uno de los fundadores de la asociación de apoyo al pueblo saharaui. Tuve la suerte de conocerlo en Madrid en el verano de 1975, pues era amigo de África, la novia de mi hermano Seve. Recuerdo su sensibilidad al hablar y hasta la atención que me prestó, siendo yo un joven con apenas 17 años. El cartel lo colocamos en la puerta del despacho de casa, donde estudiaba con mi hermano Jose. Su presencia fue permanente durante muchos años, inspirando la reproducción que hice también por esos días y que, pese a su inocencia, sirve al menos para recordarlo. Mi conocimiento del pueblo saharaui se hizo en ese tiempo más intenso. Fue el momento de unos acontecimientos históricos decisivos para el futuro de la colonia española, empezando con la formación del Polisario en 1973 y culminando con la entrega vergonzosa del territorio por parte del gobierno español a Marruecos y Mauritania en noviembre de 1975. Por otra parte, África había vivido en El Aaiún durante bastante tiempo, dándome una buena cantidad de información y contándome alguna que otra anécdota. Mi militancia política, así mismo, me permitió completar bastante ese conocimiento, pues la Joven Guardia Roja y el Partido del Trabajo de España tenían en la solidaridad con ese pueblo una de sus prioridades internacionales.

    Cuando estudiaba en la Universidad, un compañero nos contó sus vivencias de la mili en la frontera con Marruecos durante la Marcha Verde y las órdenes que tenían en caso de que la oleada de personas movilizadas por Hassan II traspasara dicha frontera. Algo que, como en otra ocasión contaré, no fue más que una puesta en escena cobarde e hipócrita, porque al poco las tropas españolas se retiraron.

    Pasado bastante tiempo, estando ya aquí en Barbate, supe que mi sobrina Diana y mi sobrino Guillermo visitaron los poblados saharauis. Una vez más pude escuchar en sus voces detalles de su modo de vida, sus esperanzas, sus temores y, de nuevo, más anécdotas, que parece que nunca faltan en su familia.

    En Barbate existe una asociación de solidaridad que desde hace años realiza diversas actividades, entre las que destacan la recogida de alimentos y la acogida durante el verano en familias de niños y niñas saharauis. Desde Izquierda Unida de Barbate, donde he militado hasta hace poco más de un año, no ha faltado la aportación de una buena cantidad de arroz y aceite, los alimentos que nos solicitaban periódicamente. El curso pasado llegué a tener como alumno a un joven saharaui, Fadel, que vive en el seno de una familia barbateña. De las muchas veces que he hablado con él, me ha manifestado en ocasiones su añoranza por la tierra que ha dejado temporalmente. Es un muchacho en el que se refleja la huella de su origen, teniendo que hacer un gran esfuerzo por adaptarse a un mundo muy distinto, incluidos los estudios que realiza para mejorar su formación. Es del Barça, cuyo escudo tenía dibujado en la portada de su cuaderno de trabajo, equipo del que continuamente me preguntaba cosas sobre su historia, sus jugadores o sus triunfos, siempre atento a mis palabras y gozoso por la temporada que hizo.

    Segunda y última parte

    Como escribía al principio, ahora estoy con el escrito de mi hermano Juan Miguel acerca de su visita a los poblados de Tindouf. Dejaré para otra ocasión los comentarios que se merece.

    El otro día envié a mi hermano Juan Miguel su escrito sobre el viaje que hizo en febrero de 2006 a los poblados saharauis situados en las proximidades de Tindouf, dentro de Argelia. Mi hermano es una persona inquieta y, por supuesto, llena de gran corazón. Tenía un gran deseo de viajar al Sáhara Occidental con el fin de conocer in situ a sus gentes y las condiciones en las que viven. Desde hace mucho tiempo ha ido conociendo a jóvenes que estudian en la universidad salmantina, con quienes ha mantenido una relación especial, teniendo en cuenta su condición de librero especializado en Medicina hasta hace tres años, en que se ha jubilado. Desde hace un tiempo está vinculado a la Asociación de Amigos del Pueblo Saharaui de Salamanca, participando en distintas actividades y sobre todo en la recaudación de fondos y productos diversos. Además de ropa y comida, que es lo más frecuente, por la experiencia que tiene de su trabajo se ha dedicado a recoger medicinas, libros y material médico y de enfermería.

    En su escrito nos cuenta cómo fueron organizando el viaje varias personas relacionadas de distinta manera con la solidaridad con el pueblo saharaui. Algunos llevan tiempo estableciendo convenios para la producción de determinados objetos (como, por ejemplo, alfombras) y la posterior comercialización en España.

    La estancia en los poblados fue corta, de apenas tres días, pero muy intensa, fructífera y reconfortante. Suficiente para que mi hermano pudiera conocer a varias familias, tuviera algunos contactos con funcionarios de la administración de la RASD y pudiera repartir parte de los fondos que llevó desde España y obtenidos, en algunos casos, con su estilo peculiar de involucrar a las personas. Unos fondos que sirvieron para comprar varias cabras lecheras y otras tantas placas solares, y ayudar a reconstruir viviendas destruidas por las lluvias torrenciales que por esos días cayeron.

    Fueron precisamente los estragos de esas lluvias, raras en un medio tan duro y árido como es el desierto, pero intensas, cuando nada más llegar a Salamanca la asociación inició una campaña de recaudación de nuevos fondos para ayudar en la reparación de los daños graves que sufrieron en viviendas e infraestructuras. Así mismo, ante el interés y empeño que siempre ha mostrado dicha asociación, pronto llegaron a un acuerdo con el gobierno de la RASD para que los fondos que se obtuvieran en Salamanca se destinasen a la reconstrucción del Centro Psíquico de Minusválidos de Rabuni.

    No olvida mi hermano en su escrito las causas de la situación en que vive el pueblo saharaui, cuando los primeros gobiernos españoles de la transición cedieron a las presiones marroquíes. Olvida, no obstante, los intereses geoestratégicos de los EEUU en la zona o los intereses económicos de determinados ministros. Así se entiende que los siguientes gobiernos, incluidos los del PSOE, con Felipe González, antes, y José Luis Rodríguez Zapatero, ahora, hayan dejado olvidado al pueblo saharaui. La confirmación de la pertenencia en la OTAN y los sucesivos acuerdos con EEUU son una clara muestra. Esto es algo de lo que me ocuparé en la siguiente entrada.

    Resulta muy importante el trabajo que están realizando con el pueblo saharaui las distintas asociaciones de solidaridad que están repartidas por todo el país. Aunque parece que no se nota, es un trabajo sordo. A esa apariencia contribuye la actitud de la mayoría de medios de comunicación, claramente manipulados. Estas asociaciones resultan altamente útiles. Permiten el traslado constante de recursos muy valiosos y necesarios, pero también que esté presente en tantos hogares la conciencia de la existencia de un problema y, sobre todo, de una injusticia. Gentes anónimas que se prestan a recoger fondos y enviarlos, a viajar cuando pueden para relacionarse con las gentes del desierto y a acoger, cuando pueden, a tantos niños y tantas niñas que llegan durante el verano a nuestro país.

    No sé que porcentaje de población saharaui vive en esos poblados, que están administrados por la república Árabe Saharaui Democrática, pues otra parte vive en los territorios ocupados por Marruecos, especialmente en la zona de El Aaiún. Por las noticias que recibimos en los medios de comunicación esa ciudad ha sido escenario en los últimos años de varios conflictos, con enfrentamientos entre la población saharaui y las autoridades ocupantes marroquíes. La represión ha sido muy dura. Procuraré documentarme para la próxima entrada, donde me centraré más en los aspectos históricos y de actualidad política.

    Fuente : Entre el mar y la meseta, 20 sept 2009

    Tags : Sahara Occidental, España, Marruecos, Marcha Verde, PSOE, PP, Felipe Gonzalez, prensa española,

  • ABC desvela el ilegal proyecto marroquí europeo en Dajla ocupada/Sahara Occidental

    Diario La Realidad Saharaui/DLRS 26 de julio de 2019

    El periódico ABC edición Canarias desvela un plan de infraestructura ilegal en la ciudad saharaui ocupada Dajla, antiguo Villa Cisneros financiado con dinero europeo.

    ABC en su edición de hoy 26 de julio en su sección nacional desglosa el proyecto marroquí que pretende llevar acabo en los territorios ocupados del Sahara Occidental, en la ciudad peninsular de Dajla con 143 mil habitantes saharauis que se han aumentado en los últimos años con los colonos marroquíes traídos desde el norte de Marruecos. Proyecto que si se llega a ejecutar destruiría la economía del archipiélago canario en su conjunto. A pesar de ser ilegal, en una zona de conflicto y el Frente Polisario y el Gobierno Saharaui aún no se han pronunciado sobre ello para tomar medidas a nivel jurídico internacional y en el marco de las Naciones Unidas.

    ABC escribe con un gran titular “Las mareantes cifras del (Dakhla Atlántico), el puerto que más daño hará a Canarias”.

    Abc en su publicación señalo que las autoridades marroquíes han acelerado este verano el futuro puerto de Dakhla Atlántico (Territorios ocupados del Sahara Occidental) que se colocará en aguas profundas de Ntirift. También indicó que los planes están en marcha con financiación obtenida desde fondos europeos y norteamericanos: el gran puerto Dakhla Atlántico y el puerto de Lemhiriz. Y ha desvelado que una naviera nórdica se haría cargo del Dakhla Atlántico como ha ocurrido en Tánger.

    Abc señala las consecuencias económicas para las Islas Canarias de este conflictivo plan en territorio en disputa y con presencia de cascos azules de las Naciones Unidas desplegados a lo largo de todo el territorio saharaui. “Estas infraestructuras se complementarán con la ampliación de la autovía Bojador-Dakhla. En términos comparativos: es como el Tánger Med, que ya ha logrado desactivar al puerto de Las Palmas a efectos de precios y competitividad en el negocio de los contenedores. Pero no solamente es para actividad pesquera. También hay prevista una plataforma amplia para reparaciones navales. Y ha advertido las extensión de las consecuencias subrayando “Tanto a Canarias como a Mauritania quitará cuota de mercado, de acuerdo con expertos del negocio naval consultados por ABC”.

    Tags : Sahara Occidental, Marruecos, Unión Europea, UE, Dajla,